Después de casi tres años de aplazar la discusión sobre el matrimonio infantil y adolescente, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó que las uniones a edades tempranas ponen en riesgo el derecho de las niñas a la educación, salud, vida, libertad y autonomía.
El pasado 26 de marzo la SCJN falló que el matrimonio infantil es una práctica nociva para niñas, niños y adolescentes y reiteró que no deben existir excepciones a la edad mínima de 18 años para contraer matrimonio.
Esa fue la respuesta a la Acción de Inconstitucionalidad (22/2016) presentada por la Comisión de Derechos Humanos de Aguascalientes, encabezada por Jesús Eduardo Martín Jáuregui, quien pidió a la Corte declarar que deben existir dispensas para que las y los adolescentes se puedan casar desde los 16 años de edad.
La Suprema Corte fijó el estándar al revisar la constitucionalidad de las reformas al Código Civil de Aguascalientes, por las que se eliminó la frase que permitía que los jueces otorgaran dispensas de edad por “causas graves y justificadas” a adolescentes de 14 a 18 años de edad.
Las y los ministros consideraron que en 2017 el Consejo de Derechos Humanos de la ONU emitió una resolución donde llamó a erradicar el matrimonio entre menores de edad. Esta resolución ha sido replicada por el Comité de los Derechos del Niño y el Comité para la Eliminación de la Discriminación Contra la Mujer que han recomendado a México establecer en todo el país la edad mínima para contraer matrimonio, sin excepciones.
En el análisis, el ministro Luis María Aguilar Morales, por ejemplo, explicó que la libertad de conformar una familia, a través de la institución del matrimonio, se encuentra condicionada a requisitos básicos, como el consentimiento libre y pleno de los contrayentes y una edad mínima para acceder a esa figura.
Asimismo, dijo que el matrimonio trae consigo la satisfacción de diversos derechos fiscales, de seguridad social, migratorios y algunos otros. Sin embargo, explicó que en menores de edad puede traer efectos negativos como la limitación para continuar con su educación.
El ministro Alberto Pérez Dayán fue quien opinó que “los absolutos siempre perjudican” y que si se restringe el matrimonio a la edad se afectaría el derecho a la libertad de vincularse a cualquier otra persona y tener familia o formar familia.
Por su parte el ministro José Fernando Franco González, explicó que hay razones nocivas que recienten las niñas, los niños y los adolescentes en su desarrollo, salud, educación, independencia y autonomía económica; y que estas afectaciones no se subsanan ni dejan de afectar con el hecho de obtener el consentimiento por parte de padres o de un juzgado.
Una de las organizaciones que envió información a la Corte sobre este tema fue Save the Children, quien consideró que la existencia de “excepciones” o “dispensas” para permitir el matrimonio precoz, no ha favorecido el desarrollo pleno de niñas, niños y adolescentes.
Save the Children junto con organizaciones como la Red por los Derechos de la Infancia en México, World Visión y Adivac, han advertido que actualmente en México hay 6.8 millones de mujeres entre los 15 y 54 años que se unieron conyugalmente antes de los 18 años de edad, de acuerdo con datos de ONU Mujeres.
Para esta agrupación, desde hace décadas esta práctica ha significado la falta de acceso a derechos fundamentales como la educación, la protección, la igualdad y no discriminación, vida libre de violencia hacia las mujeres, interés superior de la niñez, y de forma lacerante ha truncado proyectos de vida.
Ahora, la reciente decisión del alto tribunal mexicano constituye una medida de protección reforzada de los derechos de la niñez y adolescencia, declararon las representaciones en México de cuatro oficinas de las Naciones Unidas.
Esta resolución se suma a las recientes modificaciones aprobadas el pasado 21 de marzo por el Senado de la República. El dictamen avalado reformó 44 artículos del Código Civil Federal para prohibir todas las excepciones al matrimonio infantil.
Cabe decir que en este contexto, el pasado 27 de febrero la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados aprobó un dictamen para prohibir el matrimonio antes de los 18 años en el Código Civil federal y en la Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
Ahora sólo falta que la Cámara de Diputados analice y apruebe las reformas enviadas por el Senado para que las modificaciones legislativas se conviertan en realidad.