El feminismo, de acuerdo con la Real Academia de la Lengua Española (RAE) se entiende como el principio de igualdad de derechos de la mujer y el hombre, mientras que la feminidad se refiere a lo perteneciente o relativo a la mujer.
El feminismo es un movimiento social que lucha por la igualdad de oportunidades y derechos entre hombres y mujeres.
Es importante destacar que este movimiento NO busca que hombres y mujeres sean iguales física, mental o emocionalmente, pero SÍ exige que, tanto ellos como nosotras podamos aspirar a las mismas oportunidades bajo las mismas circunstancias.
Está relacionada con el género y con las construcciones sociales que hacemos a partir del sexo con el que nacemos (hombre/mujer).
Es un concepto que alude a los valores, características, comportamientos y naturaleza intrínsecas de la mujer, como género. Tiene su contrapartida en el concepto de masculinidad.
Y es que, el sistema heteropatriarcal en el que vivimos, ha atribuido características “femeninas” a las mujeres, y “masculinas” a los hombres.
Por ello, no es poco común escuchar frases despectivas como “los hombres no lloran” o “las niñas tienen que usar vestido”.
La feminidad no puede medirse por la cantidad de maquillaje que una mujer se ponga en el rostro, y va mucho más allá de lo que marquen las modas.
Ser femenina, no significa estar atada a conceptos obsoletos de cultura ni a modelos de mujer ideal basados en el punto de vista machista.