Hay muchas cosas que podemos hacer para evitar la hipersexualización en niños y niñas.
A continuación, te decimos algunas acciones que pueden prevenir la hipersexualización en la niñez:
Lo más importante es transmitirles valores con un enfoque más humano.
La colaboración, el amor, el respeto, la compasión, la inclusión, la tolerancia, el valor de la persona, deben ser más, que los adornos y el atractivo físico.
Analizar nuestros propios valores y principios, aquellos que estamos transmitiendo a nuestros niños y niñas.
Comunicación. Son importantes las explicaciones, pero también escuchar sus interpretaciones y creencias.
Dosificar los medios de comunicación y supervisar que los contenidos a los que acceden sean apropiados para su edad.
La comprensión de algo muy lógico: cada persona es única y diferente.
Las personas somos heterogéneas y nuestra belleza se encuentra en nuestras diferencias y en nuestra actitud.
Evitemos apurar a nuestros hijos, cada uno a su edad y a su tiempo irán creciendo y con ello cambiarán sus elecciones.
Vale la pena defender y proteger hasta el último minuto de infancia, de juego, porque eso construye niños y niñas fuertes, seguros de sí mismos y de su valor como individuo.
El papel de los padres es fundamental para reducir el impacto que el patrón de hipersexualización tiene en el desarrollo personal de las niñas, niños y adolescentes.
Lo es esencial es tomar conciencia de la existencia de dicho patrón, que aprendan a identificarlo y analicen de qué manera puede estar afectándoles a sí mismos.
Las madres son el principal modelo femenino de sus hijas, si ellas se liberan del patrón de hipersexualización, estarán liberando también a sus hijas.
Uno de los problemas que indirectamente se relaciona con la hipersexualización de los menores son los embarazos adolescentes.
Esto, tiene que ver con que los niños y niñas desarrollan su sexualidad a edades más tempranas y por ende tienden a apresurar su vida sexual sin protección.
La erotización de las niñas conduce a que, de manera natural, se perciba a las mujeres como objeto sexual, lo que propicia las conductas machistas y de violencia sexual al llegar a la edad adulta.
Otro gran problema que forma parte de las causas o consecuencias indirectas de la hipersexualización de la infancia es el gran aumento de pornografía infantil.
Fuente: Mamá Natural TV