El lenguaje no sexista es aquel que no excluye ni subordina, es decir, que no discrimina. El objetivo del lenguaje incluyente es eliminar la desigualdad de género, erradicar los estereotipos y visibilizar a las mujeres.

De acuerdo con los lingüistas, un cambio en el lenguaje refleja un cambio en la realidad social y cultural. En consecuencia, si se generan lenguajes incluyentes y no discriminatorios, avanzaremos en la construcción de sociedades más democráticas.

Reglas para un lenguaje no sexista

La Oficina de Igualdad de la Universidad Nacional de Educación a Distancia de España elaboró la Guía del Lenguaje no Sexista, la cual contempla, entre otras cosas:

• Utilizar un lenguaje igualitario, nombrando correctamente a mujeres y hombres. Esto es compatible con el uso de las normas gramaticales y estilísticas. 
• El uso innecesario o abusivo del masculino genérico es un obstáculo a la igualdad real entre mujeres y hombres porque invisibiliza a las mujeres.
• Para sustituir el masculino genérico se emplearán términos colectivos, abstractos o vocablos no marcados, se puede omitir la referencia o utilizar infinitivos o pronombres. 
• Cuando se trate de una mujer, se utilizarán las denominaciones de cargos, profesiones y titulaciones en femenino.
• Si se desconoce la persona destinataria, se usarán fórmulas que engloben ambos sexos.
• Si alguna mujer posee la titularidad de algo, se adecuará al femenino.
• No es recomendable el uso de la @, ya que no es un signo lingüístico.