El abuso está presente cuando existe una relación desigual y puede ocurrir en nuestra casa, con familiares, en la escuela, en el trabajo, o con la pareja.

El abuso tiene distintas formas de maltrato y existe cuando una persona quiere obtener un beneficio, aprovechándose de la fuerza física, de la inteligencia y de una posición o jerarquía, ocasionando un prejuicio o daño físico, mental o emocional a quien lo recibe y, en el que generalmente se utiliza algún tipo de violencia física, verbal, psicológica, sexual, económica o social.

¿Cómo identificar a estas personas?

Los maltratadores o abusadores suelen ser personas intolerantes, autoritarias, psicológicamente inflexibles, agresivas, crueles e insensibles.

Pero, lo que más destaca de este tipo de personas es que suelen mostrarse agradables al principio, son chantajistas y se sienten ofendidas con facilidad.

En muchos casos, este tipo de personas sufren problemas psicológicos, y algunos han crecido en familias disfuncionales y en entornos propicios para desarrollar este tipo de personalidad.

Sufrir algún tipo de maltrato, agresión o violencia, son de las experiencias negativas más dañinas que pueden vivir los seres humanos y que a corto, mediano o largo plazo afectarán la salud física, mental y emocional de las víctimas, al ocasionarles afectaciones, en ocasiones irreversibles, que les impedirán tener un desarrollo pleno en su desempeño, escolar, laboral, familiar y social.

Conocer el significado del abuso y poder asociarlo o identificarlo en nuestra vida, es el primer paso para romper el círculo de agresión y violencia que viven principalmente millones de mujeres, y es también, el primer paso para aprender a cuidar de nosotras mismas, de nuestras compañeras, amigas y vecinas, para ayudar a que las generaciones presentes y futuras aprendan a cuidarse.