Los tratamientos para las infecciones vaginales normalmente se realizan con el uso de antifúngicos como Clotrimazol o Miconazol, en forma de pomada, comprimidos u óvulos que se deben aplicar hasta por tres días o en una sola aplicación para combatir los hongos.
Sin embargo, cuando la infección vaginal es provocada por otro tipo de microorganismos, como las bacterias, el médico puede prescribir un tratamiento contra la infección con antibióticos orales o de aplicación.
En el caso de verrugas genitales causadas por el Virus del Papiloma Humano (VPH), también está indicado el tratamiento que incluye un procedimiento de cauterización de las lesiones.
Los especialistas recomiendan utilizar siempre condón durante el contacto íntimo pues existe la posibilidad de contagiar el microorganismo a la pareja y luego volver a quedar infectada después del tratamiento.
Opciones caseras
El té de pimienta rosa puede complementar el tratamiento contra las infecciones vaginales, en forma de lavados genitales y tomado como té, ya que ayuda a reequilibrar la flora vaginal y prevenir infecciones como la vaginosis bacteriana.
Es importante recordar que los remedios caseros no excluyen la necesidad de hacer la evaluación médica y seguir las orientaciones que este indique.
Durante el tratamiento contra la infección vaginal, se recomienda beber mucho líquido a lo largo del día, evitar el consumo excesivo de alcohol, azúcar y alimentos con grasa.
Otra sugerencia importante que ayuda a reforzar el sistema inmune y a evitar infecciones vaginales consiste en comer vegetales, verduras y frutas.
Es importante que sepas que la principal forma de evitar cualquier infección vaginal es con el uso de preservativos, tanto masculinos como femeninos.